PUBLICADA ESPAÑA EXTERIOR
¿OTRO NUEVO CODIGO PENAL?
Una tentación telúrica invade la mente de los políticos cuando alcanzan cuotas de poder que les permite poner en marcha arriesgadas aventuras y expandir el contenido de sus pensamientos. Y eso no está mal, cuando detrás de esa iniciativa existe un deseo de mejorar lo presente con el diseño de nuevos instrumentos y medidas que satisfagan los intereses y necesidades de una sociedad.
Hay una realidad tangible, cotidiana y alarmante que nos habla de violencia física, de violencia síquica, de impunidad de conductas de los poderosos, de privilegios de clases, de abusos de posición, de burla de los sistemas. Pero no hay una respuesta adecuada a esos “desajustes sociales” que tanto irritan y descomponen nuestra paciencia.
Asistí atónito, hace unos dias, a un juicio por defraudación fiscal contra una pequeña empresaria que tiene dificultades para mantener los 10 puestos de trabajo de su empresa. Y cuando el Mº Fiscal preguntaba al perito-testigo, actuario de la Inspección de Hacienda, si ese mismo método inquisidor y perseguidor era el que habitualmente aplicaban a todas las empresas, no tuvo dudas en afirmar: “
-“Hombre, no. Ya sabemos que tal empresa (enumeró cuatro de las grandes y emblemáticas empresas de este país) se da por descontado que no va a defraudar, porque…
La carcajada saltó de la bancada de un grupo de periodistas locales que seguían el proceso, y le mentaron al Sr. actuario de la Inspeccion de Hacienda
- “No es de extrañar que la empresa X les haya metido a Vds. un “gol de 3.000 millones de euros”
-•Silencio, por favor, inquirió Su Señoría. Compórtense, o de lo contrario les expulso”.
Un nuevo Proyecto de Código Penal está en marcha para modificar el Texto aprobado el 23 de noviembre de 1995. Pero mucho me temo que volveremos a cometer los errores del pasado. Que si el “principio de intervención mínima”…, que si el derecho comparado…, que si la tutela de los derechos del delincuente… Y simplemente porque el legislador, o sea, el ministro, es decir, la Comisión encargada de redactar ese Texto Punitivo, va a seguir “supeditando” el contexto al texto que elaboran gentes de bien, pero carentes de los conocimientos y de la sensatez jurídico-humanista que requiere la elaboración de una Norma cuya finalidad principal es “castigar”(por eso se llama Código penal) a los infractores y, de esa forma, proteger los derechos e intereses de los cumplidores, sin distinción de razas, sexos, posiciones sociales o privilegios temporales ¿Es tan difícil oír los gritos del “débil” que tan repetidamente se ve acosado, manipulado, expoliado por el “fuerte”? ¿Cuántas veces el pobre ahorrador español se ha visto burlado y no compensado durante estos últimos 40 años? ¿En dónde está el dinero “extraído”? ¿Y los infractores?
No sé en dónde está el equilibrio Pero no nos llamemos a engaño si en un momento determinado el grito se convierte en ladrido, y el ladrido da paso a la mordedura.
¿Un nuevo Código penal? Sí, pero de todos, con todos y para todos…Igual.
Fdo. Ricardo Martínez Barros