DEBEMOS REPASAR LA HISTORIA

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DEBEMOS REPASAR LA HISTORIA



 



Una cabeza sin memoria es como una fortaleza sin guarnición. El bueno de Napoleón no andaba tan desencaminado con este tipo de pensamientos, si bien   a la hora de aplicarlo a sus estrategias, pensemos en la campaña de Rusia, no debió servirle de mucho. Tal vez esto tenga algo que ver con el fenómeno del “vestido viral de Tumblr” (The Dress), que tan encendidas ha tenido a las redes sociales,   que no han dudado en proclamar que los “colores no existen”, solo existen percepciones subjetivas de una supuesta realidad cromática 



A la  Historia debe acontecerle algo parecido. Esta disciplina que cabalga entre la   ciencia y  el  arte, de claro  perfil  poliédrico, amasada con retazos de todas las memorias, capaces de parir tantas “versiones” como seres la interpretan,  nos invita a que la conozcamos, si no queremos estar condenados a repetir errores pasados, como muy bien supo advertirnos el hispanista Paul Preston



Hago esta introducción porque estoy percibiendo que estamos en la senda de volver a repetir errores, ante la desesperación de un futuro mejor que no llega y con la necesidad acuciante de resolver lo que sólo existe en las promesas.



Los emigrantes españoles están llamados, que no convocados, a citarse con las urnas en unos meses y en repetidos meses durante este año. Mediante un simple “clip” alguno de los lectores de este artículo ejercerán el derecho a expresarse sobre SI le gusta o NO le gusta. Sin embargo para votar SI o NO, o votar en blanco, a cualquiera de los candidatos que se presentan a las distintas elecciones españolas, los emigrantes en el exterior encontrarán todo tipo de trabas para expresar su voluntad, a través del voto . Se nos llena la boca con la Ley de Memoria Histórica (Ley 52/2007, de 26 de diciembre) y tantas leyes más, que no son otra cosa que “percepciones subjetivas de una realidad histórica”,  y que obligan continuamente a una revisión, modificación o supresión para alcanzar estados de desesperación como el actual. ¿Desde 1978 cuántos gobiernos y “colores” gobernaron nuestro país, nuestras Autonomías, nuestros pueblos? ¿De qué color es la emigración? Es que vamos a estar repitiendo, una y otra vez,  que la emigración necesita un nuevo sistema, actual, rápido y seguro para poder decidir sobre quienes deben gobernar el país al que pertenecen? Me da lo mismo que se llame “sistema telemático” que “sistema informático”, pero ya no es tiempo de esperar, lo mismo que no hay tiempo ya para analizar y disponer las medidas adecuadas para esa emigración de jóvenes preparados que han tenido que abandonar su país, ya sea por voluntad o por necesidad, o ambas a la  vez: Es la “nueva emigración”, que está demandando otro tipo de comportamientos



Observo que estos días, unos y otros,  presentan agendas atiborradas de actos en lugares en donde los emigrantes tienen sus locales de reunión. Me temo que no alcancemos el 3% de votantes en estas elecciones y en las próximas. Y me temo también que los movimientos que “sólo luchan para alcanzar el poder” se hayan olvidado de la Historia y nos ofrezcan un “vestido viral” que simplemente será un “juego más” de los que pueblan nuestras redes sociales y que tanto interés y devoción provocan entre los que nada tienen que perder, porque nada tienen, y los que aspiran a tenerlo, porque nada o poco tienen. No estaría de más darle un repaso a la Historia, y, de paso, comprobar si estamos de acuerdo en el color del “vestido”, por si todas esas promesas no son más que percepciones subjetivas de una realidad inexistente.



 



Marzo 2015                                                                                                           Fdo. Ricardo Martinez Barros



 



 



 


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